Las nuevas tecnologías hacen mucho bien a la educación pero como todo, el mal uso las hace enormemente perjudiciales.
Hace años conocí un sistema de espías que consistí en introducir un auricular diminuto dentro del oído y hacer sonar con un collar de inducción electromagnética. Por aquel entonces el invento costaba 300€ en china y esto impedía que fuera un sistema masificado.
El tiempo pasa y los precios bajan. Hoy en día se puede encontrar este sistema por menos de 10€ y ya hemos detectado que muchos estudiantes o disponen de uno o lo piden prestado.
Por otro lado, la lucha contra los teléfonos móviles en el aula demuestra ser poco eficaz ya que aunque les requises el móvil a un alumno, se lo quites una semana, tengan que venir sus padres a por el dispositivo, incluso acarreando sanciones de expulsión….. Los chicos siguen trayendo el móvil a clase.
Algunos profesores conocedores del tema obligan a los alumnos a dejar su teléfono en depósito mientras se realiza un examen, pero ¿cómo podemos estar seguros de que no ocultan un dispositivo como el que he mencionado? No podemos.
Mi propuesta es clara. Tenemos que cambiar el planteamiento con los teléfonos y utilizarlos como un arma educativa. Los Smartphones y las tablets son las herramientas educativas del futuro y no podemos estar enseñando libros digitales mientras prohibimos la introducción de dispositivos móviles en la clase.
Yo propongo:
- Utilizar inhibidores de frecuencia en los centros para la realización de pruebas de evaluación y formar a los alumnos en valores como la honestidad.
- Wifi abierto en las clases para acceder con tablets o teléfonos móviles a Internet pero capando en nuestro Router los contenidos no deseados que puedan distraer al alumno en clase (redes sociales, vídeos)
- Educación y prevención sobre el mal uso de las Redes sociales, el tomar fotografías de compañeros o profesores….y aquí si, aplicar sanción y dura.
Nos guste o no caminamos en un mundo TIC y los teléfonos están dentro del aula, eduquemos y aprovechémoslo.
INHIBIDORES DE FRECUENCIA
Aunque parece una medida radical, cada vez son más los centros educativos, sobre todo universitarios que instalan este tipo de dispositivos y aunque tengamos la idea de que son dispositivos caros ahora no tienen unos precios desorbitados.
En la Web de Projammers podemos encontrar inhibidores fijos y móviles por menos de 400€
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